Otra receta del libro Bollería, de Xavier Barriga. Esta elaboración es algo más complicada que la de brioche, sobre todo por que se trabaja con una masa de textura cremosa, lo que dificulta poder trabajar con ella y darle la forma deseada para que el resultado sea estético.
Ingredientes:
250 ml agua
150 gr mantequilla
350 gr huevo aproximadamente (7 unidades)
200 gr harina floja
25 gr azúcar
1/2 rama de canela
la ralladura de medio limón
azúcar (para rebozar)
Elaboración:
El primer paso es poner el agua a hervir con la canela y la ralladura de limón. Cuando rompa a hervir apartamos del fuego y tapamos para que el agua infusione. Una vez que se haya enfriado, guardamos en un recipiente con tapa y reservamos en el frigorífico hasta el día siguiente para que el agua se impregne de todos los aromas de la canela y el limón.
Colamos el agua para eliminar los restos de canela y limón, y volvemos a poner a hervir con la mantequilla troceada. Cuando empiece a hervir apartamos del fuego y añadimos la harina mezclada con el azúcar. Mezclamos enérgicamente con una cuchara de madera hasta formar una masa (a esta operación se llama escaldado). Continuamos trabajando la masa hasta que se enfríe ligeramente.
A continuación vamos agregando los huevos uno a uno sin dejar de remover la mezcla. Al final deberemos obtener una masa cremosa y no demasiado blanda.
Ponemos aceite de oliva a calentar a 170-180ºC.
Con la ayuda de dos cucharas vamos dando forma a la masa y vertiéndola a la sartén para freir los buñuelos. No conviene freir muchos buñuelos a la vez porque pueden pegarse.
Una vez dorados, los sacamos y los dejamos reposar en papel absorvente para eliminar el exceso de aceite. Finalmente rebozamos en azúcar en grano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario